El lenguaje: instrumento amplificador de valores máximos para alcanzar el Bien Común

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“Los diferentes medios de comunicación nunca serán un sustituto para la cara de alguien que alienta con su alma a otra persona a ser valiente y honesta.”

Charles Dickens

Simplemente, es que alguien  (y sería buenísimo que fueran las instituciones, las autoridades, la escuela...) tiene que empezar a generar una contra-marcha a la "igualación hacia abajo" que se viene gestando en materia de lenguaje y, en general, en casi todas las temáticas sociales, económicas y culturales, desde hace mucho tiempo atrás en nuestro país.

Hay una "moda" impuesta para comunicar, vaya a saber por quién, de expresarse "como lo hago en casa, en el café, en el ñoba, con los cumpas..."  Y los resultados de esa modalidad es que, muchos comunicadores, han "tirado de la cuerda" tanto, que no saben con qué obscenidad o estupidez despacharse para mantener su "reconocimiento" como el más crudo, el más frontal, el más jugado o el más espontáneo.

Estamos atravesando una Argentina con valores nuevos, no soy quién para decir que son desvalores pero, intento reaccionar ante estas situaciones, que se transforman en pequeños ejemplos de la insensatez en las que vivimos y que, por acción u omisión, nos enferma. Y tenemos que curarnos...

El lenguaje es la esencia de la comunicación, la comunicación es la esencia de la preservación de las especies, para reproducirse hay que comunicarse. La calidad comunicacional de las personas está determinada por su educación y de ella dependerá su desarrollo en sociedad, como individuos que conforman una masa o como actores en la construcción de un pueblo.  

Yo elijo una sociedad conformada por un PUEBLO, con identidad, con determinación y organizado. Para eso necesitamos, en principio, no comportarnos como masa "ignorante y/o estúpidizada" y, además,  proponernos a revalorizar nuestra educación, la que se verá reflejada, entre otras muchas cosas, en nuestras formas de expresarnos como sujetos sociales libres, capaces de afrontar nuestras obligaciones y de disfrutar nuestros derechos valorando la diferencias para construir una sociedad mucho más igualitaria, donde sean dirigentes quienes logren ser inmunes a los tóxicos del poder:  indiferencia, hipocresía, cinismo, egoísmo e insolidaridad. 

Por eso quiero ser uno de los que intentemos cuidar nuestra forma de expresión. Por mi parte, significa aportar mi granito de arena para alcanzar el estadio de "Comunidad Organizada"  (término acuñado por Juan Domingo Perón al cerrar el Congreso de Filosofía de Abril 1949) que es uno de los desafíos centrales para la evolución de todos los argentinos en el contexto en el que estamos viviendo.  

Las palabras pueden  conformar frases que nos ayuden a crecer, que nos propongan nuevos paradigmas y nos alienten a comunicarnos con los demás de manera apacible y sincera, evitando todo "ruido" generador de malos entendidos y, principalmente, lograr transmitir un mensaje "limpio", principio fundamental para la creación de conciencia colectiva a través de la iluminación del pensamiento individual y  de valores máximos transmitidos bajo el imperio absoluto de "La Verdad"

"Elhombre como portador de valores máximos y célula del "Bien General",punto XVII del mensaje de clausura del presidente Juan Domingo Perón al 1er.Congreso Nacional de Filosofía, Abril 1949: 

"En esta labor se nos antoja primordial la recuperación de la escala de magnitudes, esto es, devolver al hombre su proporción, para que posea plena conciencia de que, ante las formas tumultuosas del progreso, sigue siendo portador de valores máximos; pero para que sea humanamente, es decir: sin ignorancia.

Sólo así podremos partir de ese «yo» vertical, a un ideal de humanidad mejor, suma de individualidades con tendencia a un continuo perfeccionamiento.

Sugerir que la humanidad es imperfecta, que el individuo es un experimento fracasado, que la vida que nosotros comprendemos y tratamos de encauzar es, en sí y en sus formas presentes, algo irremediablemente condenado a la frustración, nos hace experimentar la dolorosa sensación de que se ha perdido todo contacto con la realidad. Lo mismo tememos cuando se fía a la abdicación de las individualidades en poderes extremos una imposible realización social.

Si hay algo que ilumine nuestro pensamiento, que haga perseverar en nuestra alma la alegría de vivir y de actuar, es nuestra fe en los valores individuales como base de redención y, al mismo tiempo, nuestra confianza de que no está lejano el día en que sea una persuasión vital el principio filosófico de que la plena realización del «yo»,  el cumplimiento de sus fines más sustantivos, se halla en el bien general."

               

       

LAS IDEAS SE PUEDEN TRANSMITIR BAJO MILES DE FORMAS...
¿Cuál es la necesidad de hacerlo de forma grotesca, violenta u obscena?