Este es el comienzo de una nueva etapa y quería acompañarla desde mi pequeñísimo lugar. Los problemas del fútbol argentino no son muy diferentes de los que padece nuestro país. La violencia está ganando terreno por todos lados y es muy difícil que "los de a pié" podamos revertir esa situación si los que se comprometieron a "conducirnos" son hipócritas, demagogos y corruptos. En Independiente llegó la hora de la verdad, dijo Javier Cantero, el presidente del primer club de fútbol que se le plantó a su "Barra Brava". "La policía tiene que deternerlos y los jueces los tienen que juzgar. Queremos terminar con ese miedo de las madres, las esposas y las hermanas cuando sus familiares van a la cancha. Todos se dieron cuenta que hay que terminar con este Frankenstein", agregó el presidente del club del "Rojo de Avellaneda" en su discurso improvisado.
La pelota empezó a rodar en la cancha, veremos quién hace los goles ahora...
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